“Sumario: Principio de la prosperidad de la Villa. -Consecuencias de esta prosperidad. -Aumento de la esclavitud e inmigración de Jamaica. -Trinidad al finalizar el siglo XVIL. -Perdida del archivo de los primeros tiempos. -Relación de los Gobernadores y Alcaldes.

“En los albores del siglo XVII se inicio una época de prosperidad para la Villa con la explotación de distintos cultivos, laboreo de minas y crianza de ganados, y se aumentó el comercio merced a las naves que rendían viaje al continente, haciendo escalas, unas veces en la boca del Guaurabo y, otras, en la bahía de Casilda, por cuyos alrededores comenzó a fomentarse una pequeña población de marinos y estancieros. De este modo estableciose el intercambio de los productos a falta de signos fiduciarios, y así, en aquellos días tuvo su origen el problema de la carestía de la moneda de vellón. En 1610 comenzó el cultivo del tabaco en vegas autorizadas, sobre todo, a orillas de los ríos Ay y Arimao, cultivo que fue acreciendo por la demanda que tenía la rica hoja y el polvo rapé que con ella se preparaba, y más adelante se creo la Factoría e intervino el Cabildo Consistorial en la defensa de dicho producto.

“La importancia que tomaba la villa trajo, como consecuencia, el asalto de los piratas y corsarios que la saquearon en 1642 y 1654. En 1689, encontrándose en espera del resultado de un juicio de residencia en Trinidad el Capitán General Diego de Viana e Hinojosa, pudo presenciar la alarma de los vecinos al observar que seis buques corsarios extranjeros penetraron, tranquilamente, en el puerto, siendo tales las depredaciones que sugirió el vecindario y tales las quejas formuladas que, en 1693, el Capitán General, Severino de Manzaneda, propuso que los ediles trinitarios se trasladasen a la bahía de Jagua, pero esto fue rechazado.

“El aumento de la esclavitud que proporcionaba brazos a las faenas agrícolas, principalmente, en las colonias de caña, -fruto éste que Colón llevó de Canarias a Santo Domoingo, y de ahí trajo a Cuba, estableciéndose plantíos en Trinidad; la llegada de los emigrados españoles de Jamaica, en 1655, algunos de los cuales se establecieron en esta Villa, fue aumentando su importancia y, con ella, el intercambio de productos y el tráfico ilícito con la propia Jamaica.

“Debido a la construcción de las viviendas de techo de guano, los incendios menudeaban, sufriendo con ello la primitiva población aunque, si bien se mira, esto dio origen a que fueran mejoradas algunas viviendas, como la Casa Consistorial, que se construyó de piedra y adobe, y obligó al Cabildo a legislar sobre la construcción de las casas, pero hasta años más tarde, no se organizó en debida forma esta reglamentación.

“Al finalizar el siglo XVII, no obstante todos los inconvenientes narrados, la Villa de la Trinidad, -dice Don José Martín Félix de Arrate: "estaba poblado con quinientos o seiscientos vecinos, con un Convento de San Francisco; su Puerto más traficado es incómodo por servirse de un río, pero tiene a distancia de dos leguas la bahía de Casilda y otros Surgideros. Hace azúcar y coge buen tabaco y aunque el terreno es alto y pedregoso, logra mejores cosechas que otros lugares por la aplicación y trabajo de sus vecinos; comercia con Cartagena y Portobelo que la proveen de dinero y con Campeche que saca venados y algunos ajuares".

“El aumento y prosperidad de la Villa dio origen, desde principios del siglo XVIII, a la codicia mayor de piratas y corsarios, cuyos ataques proporcionaron páginas gloriosas, como se describen en el capítulo de este libro titulado "De los ataques de Piratas y Corsarios".

“El archivo municipal de los primeros tiempos de la colonización se perdió a causa de un incendio, de los muchos que, a menudo, ocurrían; este debió de ser anterior a 1728, porque, de ese año, datan los primeros libros de Actas Capitulares. Se conserva, sin embargo, un libro que comienza con documentos de 1725.

“Los Tenientes Gobernadores que gobernaron a Trinidad son los siguientes:

“El primero de enero de 1879, por acta levantada en el Muy Ilustre Ayuntamiento y refrendada por Faustino Rodríguez, como Secretario, aparece que, el Coronel Santalís entregó la Presidencia de la Corporación Municipal, el Gobierno y Representaciones del Término, a D. José Font y Bandrich; posteriormente, desempeñaron la Alcaldía Municipal los siguientes señores:

“Don José Cóndom. D. Cesáreo de la Fuente, D. Francisco Soler, D, Vicente Gómez, D. Victoriano S, Buruaga, D, Estanislao de Olóriz: D. Rafael Suárez; Alcalde Corregidor, Comandante, D. Enrique Ubieta, D, Rafael Suárez (segunda vez), D. Antonio Cacho Bonet que correspondió a la época de la Autonomía, y fue el último de la colonia. Al ocurrir el cambio de régimen, las funciones municipales, en principio, pasaron al Gobierno Interventor.

“Con motivo de la desaparición del Archivo Municipal anterior al año 1725, se da comienzo a la relación de los Gobernadores, con D. Miguel de la Tapia de Catalegui, Capitán de Infantería, que tomó posesión en junio 15 de 1728, pero, por actas del Cabildo de Remedios, aparece que, en enero de 1696, fue elegido Teniente Gobernador de Justicia y Guerra de la Ciudad de Trinidad y demás lugares de su Partido. D. Gerónimo Francisco de Fuentes y Herrera, padre del célebre Capitán Fuentes, que, encontrándose en Sta. Clara, al atravesar una callejuela, fue muerto por un desconocido que no pudo ser capturado.

“En 1703, mes de enero, gobernaba a Trinidad D. Tiburcio Bernal do Quiróz, como Teniente de Justicia y Guerra de esta ciudad y demás villas de Sancti Spíritus, Remedios y Villaclara, y Juez de residencia de ellas, por nombramiento del Maestre de Campo, D. Pedro Nicolás Benítez de Lugo, Gobernador Capitán general de la Isla.

“En junio del propio año 1703 se dejó sin efecto ese nombramiento, y fue designado, Teniente Gobernador de la ciudad de Trinidad y las otras tres Villas, D. Cristóbal Francisco Ponce.

“A la sazón en que ocurría el cambio de régimen y advenimiento del Gobierno norte-americano, desempeñaba la alcaldía D. Antonio Cacho y Bonet, y así continuó hasta el 4 de febrero de 1899 en que, por Decreto del Coronel George Le Roy Brown, Gobernador Militar que, en 25 de diciembre, se había hecho cargo del gobierno de la plaza, fue nombrado Sub-Gobernador del Distrito de Trinidad. D, Carlos Iznaga fue designado alcalde, y el Ayuntamiento quedó formado así: Primer Teniente Alcalde, Simón Arrechea; Segundo Teniente Alcalde, Benito Conde; Tercer Teniente Alcalde, Leonardo Fuentes; Síndico, Antonio Marín Hernández (padre del autor de este libro); Concejales, Antonio Torrado, Patricio Soto del Valle, Pedro Alomá Martínez, Justo Germán Cantero, Felipe de Lara, Victoriano Fernández Quevedo, Cirilo Carreras, Manuel Fernández Fraginals, Juan Rodríguez Hernández, Alejandro Cantero, Pedro José Valdespino, Julio C, Bastida Arias, Juan Vivanco, Juan Nazario Rodríguez, Julio Pichs, Daniel Torrado, Mariano Iznaga Amat, quedando así, con estos funcionarios, constituido el gobierno local en los primeros días de la Intervención.

“Desde 1902, al constituirse la República, hasta el 12 de agosto de 1933, en que todo el orden constitucional democrático se vino al suelo, fueron Alcaldes de este termino: Carlos Lynn Georoviche (por elección); Pedro Alomá Martínez (interino); Juan Bravo Pérez (elección); Pedro José Valdespino (elección); Jesús Lugones León (elección); Antonio Cacho Bonet (elección); Manuel de la Luz Irarragorry y Cadalso (por sustitución); Pedro Sabín Hechavarría (elección); Máximo Sanjuán Gutiérrez (elección); José Espinosa Pedierro (elección); Pedro Alomá Torres (por decreto presidencial); Francisco Marin Villafuerte (interino, como Secretario de la Administración municipal); Carlos Pérez Cancio (elección); Rafael Echerri Castellanos (interino); Joaquín Mendoza Peña (elección) que fue obligado a renunciar con motivo de los sucesos iniciado, el 12 de agoto de 1933 al ser derribado el Presidente Machado. Después de esta fecha han sido Alcaldes: Herman Pettersen (de facto); el Capitán R. Fernández Lemkuhl, hijo de madre trinitaria (de facto); Félix Peña (de facto); José A. Bravo (elección) y René Gregorio, liberal (sept. 15-1944)."

“(1) Hijo de Trinidad y progenitor de varias familias Trinitarias.

“(2) Viviendo donde hoy está el Centro "La Luz", le dispararon un tiro, y lo hirieron.

“(3) Progenitor de varias familias de Remedios, donde casó con Doña Dolores de Rojas. En Trinidad nació el 24 de septiembre de 1834, su hijo que fue el Excmo, Sr. José de Caturla y Rojas, Coronel de Milicias.

“(4) Casó con Doña Isabel Borrell. Padre de la Duquesa de La Torre, esposa del Capitán General y Regente de España, General Serrano.

“(5) En su época, se construyó la plaza de recreo que hoy se denomina de Céspedes.

“(6) Vivió en la casa de lacalle de la Amargura, No. 34 (A).

“(7) En su época se construyó la Cárcel.

“(8) De triste recordación, se hallaba aquí, mando el movimiento llamado de Siguanea.

“(9) Contrajo matrimonio en Trinidad.

“(10) En su época se construyó la, plaza que hoy llaman de Martí. Por !o tanto, de ese Teniente Gobernador tomó el nombre de "Serrano". Era hijo de Pinar del Río.

“(11) Durante su mando se inauguró la Casa de Beneficencia, hoy convertida en Hospital "General Wood".

“(12) Epoca en que mayor número de cubanos se fusilaron en Trinidad.”