“Sumario: Diego Velázquez en Trinidad. -Fundación de la Villa. -Posible recalada de Colón en su segundo viaje. -Centro de su fundación. -Ubicación de los principales edificios. -Por qué se llamó a la Villa Santísima Trinidad. -Repartimientos de indios. -Nombres de los beneficiados. -Fecha posible de la llegada de Velázquez a Trinidad. -Celebración de la primera misa. -Fieles que asistieron a ella. -El jigüe histórico. -Organización del primer Ayuntamiento. -Primeros gobernadores de Trinidad. -Fundación de Sancti Spíritus. -Emigración hacia este lugar. -Litigio sobre antigüedad entre Trinidad y Bayamo. -La famosa ceiba de Hernán Cortés.

“El Adelantado Don Diego Velázquez, de Cuéllar, fundó en la provincia indiana de Guamuhaya la Villa que llamó de la SANTISIMA TRINIDAD, "en un lugar saludable donde el cielo era claro y el aire puro y suave".

“Generalmente, se cita el año 1514 como fecha de la fundación, estimando algunos historiadores o cronistas que pudiera haber sido el mes de mayo o el 11 de junio, por la Festividad de la Santísima Trinidad en dicho año. No son aceptables estas opiniones, por ser la fundación de la Villa de TRINIDAD anterior a la de Saneo Spíritus, pues hallándose Velázquez en Trinidad -dice Pezuela- dispusose fundara, concurriendo a ello algunos de los fundadores de Trinidad. Además, el día de Pentecostés -festividad del domingo anterior a la Santísima Trinidad- concurrió el Padre Fray Bartolomé de las Casas a predicar a la Villa de Sancti Spíritus, según expresa el mismo en su Historia de las Indias.

“Cronistas autorizados señalan el día 4 del mes de enero de 1514, como el de la fundación de la Villa de Trinidad. Manuel José Quintana, en su biografía de Fran Bartolome de las Casas, dice: "De la costa del sur volvieron a la del norte por orden de Diego Velázquez, el cual, después de haber asentado la población de Baracoa y repartido las tierras e indios de aquellas tierras y las contiguas, trató de ir reconociendo la isla para determinar los otros puntos en que convenía poblar. Juntose con el cuerpo expedicionario de Narváez en el puerto de Xagua, y en aquella comarca resolvió fundar la Villa que después se llamó Trinidad. Señaló los vecinos e hizo los repartimientos de estilo, entre los cuales, uno de los más aventajados fue el de las Casas, premiándole, de este modo, los servicios que había hecho en la expedición (1514)". Las Casas llegó a Cuba con Velázquez en 1511 y formó parte de las exploraciones de la Isla, debiéndose a su protección a los indios, que los conquistadores pudieran avanzar en paz en su recorrido y tener albergue y alimentos, pues los naturales se aterrorizaban ante las atrocidades de Narváez y su gente y la presencia del dulce Fraile los aplacaba y ganaba.

“Sabido es que Colón, en su segundo viaje, tocó en el litoral del mar del Sur, probablemente, en el estero del Masió. Había noticias entre los conquistadores que, en la comarca de Guamuhaya, se recogían arenas de oro. Esto se estima como uno de los motivos de la fundación de la Villa de la Trinidad; aunque se ha aceptado como seguro, el hecho de que Velázquez, al determinar los puntos donde se fundaron Santiago de Cuba y Trinidad, tuvo en cuenta la necesidad de poblaciones de fáciles comunicación y relaciones con Jamaica y Costa Firme.

“En cuanto al lugar de la fundación, necesario es fijarse en la topografía del terreno que no ha variado, y en la costumbre de los colonizadores de fundar, bajo el mismo régimen, toda las poblaciones. Se le daba al terreno consagrado al pueblo la forma de un rectángulo, con la Plaza Real trazada en el punto central, para levantar, a su alrededor, la Iglesia y los edificios públicos, ocupándose el espacio restante con las residencias particulares, de acuerdo con los repartimientos y mercedes a los vecinos. De esto se deduce, lógicamente, que, donde se señaló la Plaza Mayor, como fundo de la nueva Villa, es el ocupado por el Parque Martí y parte de sus alrededores que, en un principio, debieron de tener la forma de una planicie elevada; y en la parte posterior, las alturas escabrosas del cerro de la Popa, y, en la inferior, la llanura anegadiza por las fuertes corrientes de aguas pluviales, y, como continuación, la sabana estéril antepuesta al mar de las Antillas.

“Los naturales del Cacicazgo de Guamuhaya debían de levantar, esparcidas, sus viviendas por las orillas de los ríos cercanos, el Guaurabo, y sus afluentes el Táyaba y el Caballero; también en las márgenes del Ay, donde se estableció el primer caserío rústico de los colonizadores. Respecto a la fundación de la Villa bajo la advocación de la Santísima Trinidad, hay que declarar que no fue por el hecho de llegar los conquistadores al término de su recorrido y poner los cimientos de la naciente población en día de la patrona. Velázquez y sus compañeros verificaron la exploración en los navíos llamados "la Ventura" y la "Santísima Trinidad". El navío de este nombre fue el empleado, en 1510, por Diego de Nicuesa para llevar, de orden y por cuenta del Gobierno, treinta y seis esclavos negros a la Española. Se ha deducido de esto, acertadamente, que la denominación de la nave capitana diera, tal vez, origen al nombre de la nueva Villa de la Trinidad.

“Guiteras dice, estimándose bien documentado, que fue "fundada la Villa de Trinidad a nueve o diez leguas de donde estaban (se refiere a Velázquez y compañeros de exploración), hacia Oriente, por ser lugar de muchos pueblos cerca del puerto de Casilda, sepultura de muchas naves en los primeros tiempos de la navegación de las Antillas. Púsole por nombre "La Trinidad", y repartió indios entre algunos de sus capitanes y amigos; de ello fueron entre los más favorecidos, su cuñado, Francisco Verdugo, Juan de Grijalva, Pedro de Alvarado y sus hermanos Jorge, Gonzalo, Gómez y Juan, el Padre Las Casas, a quien dio un buen repartimiento en Canarreo (el cronista Bernal Díaz del Castillo dice que el pueblo nombrado Yaguarama), junto a Xagua y Pedro de Rentería que había sido Teniente de Velázquez, a quien, por amor a Casas, dio otro junto al suyo". Hay que señalar el hecho de que, tanto el bondadoso Casas, como el piadoso Rentería, renunciaron después esos favores.

“No carece de verosimilitud la versión de que Velázquez llegó el 21 de diciembre de 1513 a unos pueblos de indios que residían en el litoral sur de la provincia de Guamuhaya, donde fue muy agasajado por los naturales. Los cubaniqueyes conocían ya a los hombres blancos que, en breve, habrían de causar el espanto de la comarca indígena, reducirlos a la esclavitud y convertirlos en bestias de carga, y a sus mujeres, tenerlas en rehenes. Velázquez tomó posesión, en nombre de los Reyes de Castilla, de los magníficos valles del Cacicazgo del Guamuhaya, donde había penetrado a fines del referido mes de diciembre por la boca del río Guaurabo, brindando, los ingenuos naturales, sus propias embarcaciones para transportar río arriba, a los colonizadores que fueron recibidos con fiestas y agasajos. En los primeros días de enero de 1514 -el día 4, según se ha referido-, escogido el lugar que se estimaba más a propósito, fue fundada la Villa de la Santísima Trinidad, flameando al aire las banderas traidas de sus buques, y que eran de color verde con cruz negra en el centro y a los lados, una F y una I: Fernando e lsabel.

“Un lugar en que convergían dos caminos, encrucijada que forman actualmente las calles llamadas Real del Jigüe y Boca, fue el escogido por los conquistadores para que, el ministro del Señor que los acompañaba, celebrara, por vez primera, el Santo Sacrificio de la Misa, oída con recogimiento por Velázquez y sus compañeros, entre los que sobresalían el tristemente célebre Capitán Panfilo de Narváez; el bueno de Pedro de Rentería; los célebres Capitanes Francisco Fernández de Córdova (descubridor de Yucatán), Pedro de Alvarado, Vasco Porcayo de Figueroa, sobresaliente personaje de la conquista, que fue de los que mayor impulso dio al progreso de la Villa, extendida hasta Sancti Spíritus y Remedios; los marinos Cristóbal de Olid, Diego Méndez, Hernán López, el Linajudo, los oficiales Juan Velázquez de León, Gonzalo de Sandoval, Alonso Hernández Portocarrero, Alonso de Avila Ortiz y Alonso Rodríguez, Jorge Alvarado y otros alentados por el estímulo de los repartos de tierras y encomiendas de indios.

“Bajo un frondoso jigüe fue levantado el modesto altar donde se celebró la ceremonia, ante los hombres blancos, conquistadores de oro, llegados de tierras extrañas y ante los sencillos siboneyes, atónitos, que no se explicaban lo que veían. Luego, el lugar, el árbol, los atributos de la ceremonia y la bandera inglesa capturada por los milicianos trinitarios en 21 de julio de 1797, dieron origen al Escudo de Armas que se concedió a nuestra Ciudad, según se verá más adelante.

“Velázquez procedió a organizar el primer Ayuntamiento, nombrado, a usanza de Castilla, dos Alcaldes y cuatro Regidores; designando Gobernador al Capitán Francisco Verdugo, su cuñado, que quedó al frente de la nueva población constituida con hombres traidos por Velázquez que se estiman en unos doscientos soldados y con las cuarenta familias indígenas que formaban el Cacicazgo del Guamuhaya. Los indios fueron sometidos a la esclavitud y empleados en los trabajos del transporte de madera, labor de construcción y aprovisionamiento de la Villa que se levantaba.

“Se construyó la Casa de Gobierno en la esquina diagonal al lugar donde fue celebrada la misa, instalándose, también, allí, más adelante, la primitiva Cárcel Real. Gobernaron, sucesivamente a la Villa: Hernán López, Gonzalo de Sandoval, que, con conocimientos de alarife, dirigió las primeras construcciones; y Vasco Porcayo de Figueroa, fundador de la Villa de San Juan de los Remedios que, a pesar de su ancianidad, y siendo principal hacendado de las Villas de Sancti Spíritus y de Trinidad, marchó en 1538 a visitar, en Santiago de Cuba, al Gobernador Hernando de Soto; y fue designado Teniente General de la expedición que se preparaba para marchar a la Florida, a la que contribuyó con no escasos bastimentos de todas clases (1).

“Algunos de los fundadores de la Villa de la Trinidad concurrieron a la fundación de la Villa de Sancti Spíritus por orden de Velázquez, según se ha hecho mención. El propio Padre Las Casas, protector de los indios, realizó en estos pueblos misionera labor, y se estableció, después, en los lugares que se le habían designado, según puede verse en la descripción de Bernal Díaz del Castillo, cuando relatando el naufragio y peripecias sufridas antes de llegar a la Villa de Trinidad escribe: "con gran trabajo salimos a una playa de arena, y de ahí, a dos días de camino, llegamos a un pueblo de indios que se decía Yaguarama, el cual era, en aquella sazón, del Padre Fray Bartolome de las Casas, que era clérigo presbítero y, después, le conocí Fraile dominico, llegó a ser obispo de Chiapa y los indios de aquel pueblo nos dieron de comer". El mismo Díaz del Castillo, testigo presencial de los hechos que narra en su Crónica de Indias, dice que Alonso de Avila tenía en el camino otro pueblo de indios llamado Chipiona.

“Respecto a los fundadores de la Villa de Trinidad, Alonso Hernández Puertocarrero (2), primo del Conde de Medellín, Gonzalo de Sandoval, Alguacil Mayor y Gobernador que fue ocho meses y Capitán, después, en la Nueva España, y Juan Velázquez de León fueron de los que se quedaron avecinados en Sancti Spíritus y se incorporaron, en 1518, venidos de aquella Villa, a la expedición de Cortés.

“Esto es lo consignado por los historiadores de Indias y sus comentadores respecto a la fundación de la Villa de la Trinidad en el año 1514, después del reconocimiento del Adelantado Velázquez en las costas Norte y Sur e interior del país; pero no se ha presentado un documento convincente; las más de las citas son de referencia; porque el hecho de la fundación, de existir actas o papeles, constará en los archivos colombinos de que no disponemos; y las cartas del Adelantado Diego Velázquez a la Sacra Magestad no contienen datos detallados de la fundación, sino informes de las Villas fundadas y que tenía a su servicio.

“En cambio, hay un dato importantísimo sobre este asunto que dio origen al expediente a que hacen mención las Memorias de la Sociedad Patriótica (3), donde pueden leerse estas interesantes noticias: "En cuanto al primer particular, el Capitán de estas milicias blancas, Don Pedro del Prado, en su libro geneológico, señala la fundación del Bayamo en el año de 1512, pero, en varios acuerdos capitulares celebrados sobre la solicitud de la Villa, hoy ciudad de Trinidad, queriendo ser más antigua que esta del Bayamo, se alega que, nuestra actual situación es más moderna que la que tuvo con el nombre de Nueva Sevilla en la Provincia de Macaca donde, hasta hoy, se conoce una especie de sabana con el nombre de Pueblo Viejo. El año de 1511 fue cuando, por disposición de la Real Audiencia de Santo Domingo, se trasladó, para evitar los desórdenes que se experimentaban en el pueblo de indias, nombrado las Ovejas, situado Río en medio del lugar que, hoy, al presente, ocupa esta Villa. La fecha de los enunciados acuerdos y Real provisión que se cita se expresaban en los extractos de que he hablado a V.E. en mi anterior y podía servir, a falta de los originales archivados, que, como también he dicho, no existen ya; más, en las circunstancias de haberse diputado el punto en el Gobierno de Cuba a donde se dirigieron los referidos acuerdos, hace conocer que la contienda se suscitó en tiempos que la expresada villa de Trinidad pertenecía a la gobernación de Cuba, y puede suceder que allí existan estas diligencias".

“Se inició, pues, un expediente, a solicitud de la Villa de Trinidad alegando sus derechos a ser más antigua que la de Bayamo, lo que dio origen a que los cronistas de esa Villa sostuvieran su fundación desde el 1511, dado que, los acuerdos capitulares celebrados sobre la solicitud de la Villa de la Trinidad, establecían el derecho de fundación, desde el 1512, con prioridad a la de San Salvador del Bayamo; derecho que permanece en pie, a pesar de todas las noticias que se hayan publicado sobre la fundación de la Villa de la Trinidad en 1514. Esas diligencias de la disputa que conoció el gobierno de Cuba son, puede decirse, la clave del asunto, pero como el informe transcrito no añade más datos que se refieran a Trinidad, ni se cita la fecha de los acuerdos capitulares que recayeron a solicitud de la Villa de la Trinidad, todo este asunto, para resolverlo, tiene que estudiarse en los Archivos de Bayamo y Santiago de Cuba (4).

“La tradición señala la corpulenta e histórica ceiba de las márgenes del "Guaurabo" como el árbol en que se amarraron las naves de Hernán Cortés cuando su empresa de la conquista del imperio de los Aztecas; ceiba ya celebre por estar asociada a los primeros días de la conquista del Cacicazgo del Guamuhaya.”

“(1) Los que no tengan a la mano ciertos libros, ya raros sobre la vida y hechos de Vasco Porcallo de Figueroa puedan consultar con provecho los capítulos IV, V y XIII de la interesante y amena historia de Remedios del Dr. Manuel Martínez Escobar. Editor: J. Montero. Habana 1944. R. R. A.

“José A. Martínez Fortún: Anales y Efemérides de San Juan de los Remedios y su jurisdicción, tomo le pp. 28 a 34. Habana, 1930.

“Según documentos que vio en Sevilla al Dr. Martínez Fortún (pp. 33-114), Vasco Porcallo falleció en México a fines de 1539.

“(2) Un descendiente de este fundador, de iguales nombres y apellidos, fue padrino de bautizo, en 1605, de Juan, hijo de un indio del Bayamo, avecindado en Trinidad.

“(3) Tomo X, Páginas 335 y 336, Año 1840.

“(4) En "Historia, de las Indias" dice el Padre Las Cases: "Señaló Diego Velázquez el lugar donde se asentase una Villa, nueve o diez leguas de puerto de Xagua hacia el Oriente, porque estaba más en comarca de los más pueblos de los indios, donde había una manera de puerto, harto mal puerto, porque allí se perdieron después algunos navíos; quiso que se llamase "LA LA VILLA DE LA TRINIDAD", como si la Santísima Trinidad hubiera allí de ser servida. Ordeno que se poblase otra villa más adentro en la tierra, cuasi en medio de los dos mares del Sur y Del Norte, y llamola la, "Villa de Sancti Spíritus"; otra señalo en el Puerto del Príncipe, a la costa Norte, y otra, en Bayamo, que creo se llamó "LA VILLA DE SAN SALVADOR", y otra, en el Puerto de Santiago que, después, fue ciudad y Cabeza del Obispado en aquella Isla. Y así, con la primera, que fue la de Baracoa, hubo, al principio, seis villas; después, el tiempo andando, se pobló la del Puerto de Carenas que, agora, se llama la de la Habana". En estos párrafos del Padre Las Casas se da prelación a la Villa de la Trinidad en el orden de la fundación de pueblos.”