“Cuba y la Casa de Beneficencia” |
“y Maternidad de La Habana” |
“Así es Cuba” |
Cosas de mi Tierra |
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Ensayo en el ejemplar que tenemos de “Así es Cuba” por Alberto Boix Comas. Aparentemente editado a principios de la década de 1950. |
“Cuba y la Casa de Beneficencia” |
“y Maternidad de La Habana” |
“Tiene La Habana frente a la inmensidad del mar y contemplando el centenario Castillo del Morro y como una siempreviva de la exquisitez y nobleza del corazón cubano, a uno de los edificios más populares, mudo testigo de grandes pasiones, de Secretos amores y de extraños sentimientos, famoso por su misión social y por sus años de existencia conocido con el nombre de Casa de Beneficencia y Maternidad de La Habana, amparo y protección de los niños huérfanos y abandonados, crisol de futuros ciudadanos y plasmador de hombres y mujeres que salvados del arroyo por su presencia secular se convierten en padres de familia modelo y excelentes trabajadores. |
“Para encontrar el origen de esta Institución tan digna de encomio hay que remontarse al segundo siglo del Descubrimiento de la América ya que se puede afirmar que inicio sus actividades bajo el nombre de "Casa de Depósitos" en 1687, siendo su patrocinador y su alma el obispo habanero Fray Diego Evelio de Compostela. Más tarde, en 1705, surgió la llamada "Casa Cuna" auspiciada por el también obispo de la habanera diócesis Fray Jerónimo Valdés quien no solo dio bienes de fortuna y entusiasmos a la obra, sí que también dio su nombre a todos los desheredados que a dicha casa llegaban como víctimas inocentes, ansiando con ello evitar que surgiera más adelante en el campo de la vida el complejo de inferioridad que pudiera ser obstáculo a las ansias de dicha y felicidad de los que en la sucesión de los días iban transformándose en hombres y mujeres. En 1830 con los bienes que dejara para fines caritativos doña Antonia María Menocal, el presbítero Mariano Arango fundo la "Casa de Maternidad de María Santísima y San José" que posteriormente se denomino "Hospicio de San Isidro" para acabar de refundirse con la "Casa Cuna" y creyendo más tarde el padre Arango corresponder con lealtad a los deseos y fines perseguidos por Doña María, demostró la conveniencia de que la "Casa Cuna" se refundiera en la de Maternidad, idea que se llevo a cabo con el beneplácito de la Junta de Caridad integrada por lo más granado de la sociedad de aquellos tiempos y por los prohombres de más reputación de la época. |
“Durante el Gobierno de don Luis de las Casas, allá por el año de 1792 a iniciativa de la Condesa de Jaruco, de los Marqueses de Cárdenas de Monte Hermoso, del Marqués de Casa Peñalver y del Obispo de las Provincias de Louisiana y de la Florida, don Luis de Peñalver se fundo la llamada "Real Casa de Beneficencia" asentándose en un cuarto de caballería de terreno que el obispo de Peñalver cedió generosamente para este fin. |
“En 1852 después de pasar por sus respectivos períodos evolutivos, todas las instituciones que se encontraban unidas por la misma cristiana y noble misión se refundieron bajo una sola agrupación que adopto el nombre de Real Casa de Beneficencia y Maternidad de La Habana que ocupo el cuarto de caballería citado donde levanto su gran edificio frente al mar y de cara al sol, el mismo que el pueblo habanero contempla y conoce con el nombre de Casa de Beneficencia y Maternidad de La Habana con el que oficialmente se registro al surgir en el consorcio de los pueblos libres y soberanos la República de Cuba. |
“A medida que pasan los años esta Institución sigue siendo un modelo entre sus similares del mundo gracias a la sabia y acertada actuación de la Dirección que coopera eficazmente a las iniciativas de la Junta de Gobierno de la Casa y se ve respaldada de una manera digna de todo encomio, por lo que supone de sacrificio y dedicación, virtudes que forman parte de la vida modesta y heroica de las Hermanas de la Caridad de San Vicente de Paúl a cuyo cargo y nobles sentimientos se encuentran confiados los hijos de nadie que surgen a la vida bajo el susurro y las caricias de los que saben dar a la Casa de Beneficencia y Maternidad de La Habana ambiente hogareño más que de asilo. |
“Los que llegan a este Centro de Amor y formación, como naciendo a la vida, a medida que avanzan en el camino de la existencia van encontrando el campo adecuado a su edad, ya que de la cuna de recién nacido con sus mimos y cuidados pasan a las aulas de kindergarten y de los grados sucesivos hasta adentrarse en el taller donde se forjan los hombres y las mujeres que habiéndose plasmado al calor de las ideas de verdadera ciudadanía, aunque en su yo íntimo pueden llevar la tristeza de la tragedia de su origen, saben con todo bendecir a su Patria que les dio cuna y hogar, casa y cariño, escuela y templo, campo, taller y vida a través de la bendita por ellos Casa de Beneficencia y Maternidad de La Habana que resulta ser, sin discusión alguna uno de los mejores crisoles de verdadera cubanidad.” |