Los mogotes y sus respectivas cuevas en el Valle de Viñales sirvieron de refugio a las culturas precolombinas que habitaron en Cuba antes del descubrimiento de la Isla por los europeos. En algunas de estas cuevas se han encontrado pinturas, restos de los utensilios y entierros de tales culturas.

Con el descubrimiento vinieron ciertos cambios, y aquellos que habitaban la Isla fueron exterminados en su gran mayoría. Entonces trajeron las culturas africanas, que gracias a su resistencia física podían soportar los atropellos por más tiempo. Pero no todos estaban dispuestos a una vida de maltrato y cada vez que podían se escapaban, convirtiéndose entonces en negros cimarrones. En esta región de Pinar del Río fue en los mogotes, y posiblemente en las cuevas durante los temporales, donde los cimarrones lograron escapar los perros que les perseguían.

Esta cueva se encuentra próxima a la carretera de Viñales a San Cayetano. A unos cuatro kilómetros de la ciudad de Viñales, antes de llegar a La Cueva del Indio.