Muy interesante lo presumidas que son las cubanas. Es que tal parece que nacen con esa cualidad ya desarrollada. El sol no es tan torturador en Cuba y en mayo, cuando muchas de estas fotos fueron tomadas, realmente la temperatura no es nada desagradable. Pero no, ellas a las calles salen envueltas en un aura de frescura y alegría. No importa si llueve o hace sol, de todos los elementos capaces de alguna forma robarles su simpatía, ellas se protegen con una buena sombrilla.

El uso de las sombrillas para resguardarse del sol es muy lógico, mas sin embargo, no aparenta ser tan común en otras partes del mundo como lo es en Cuba.

No sabemos por seguro, aunque en los últimos años nos hemos estado fijando específicamente en este detalle en nuestros viajes y realmente no lo hemos visto. Mientras que en Cuba, hay veces es difícil tomar una foto sin que por alguna parte salga una sombrilla.

Definitivamente el grado de uso como parte del vestuario que vemos en las últimas dos fotos son puro de las cubanas y sus sombrillas. ¿Quién sabe? cosas como esta, que aparentan ser tan normales, son lo que le dan la peculiaridad a ciertos lugares.

Notaron que también las llevan de diferentes formas. Unas la llevan a la espalda. Otras la mantienen paradita. ¿Será qué existe un lenguaje de las sombrillas entre las cubanas?

No, no es cosa de juego. En tiempos de las abuelas las cubanas tenían su propio lenguaje de los abanicos.

Por seguro nosotros no vamos a averiguar. No vaya a ser cosa que la respuesta a esta pregunta, como parte de ese idioma, sea un sombrillazo por la cabeza.