“Es el 20 de mayo de 1902, ¿Por qué motivo miles y miles de personas, junto al litoral del canal que (la entrada al puerto de La Habana, miran con fijeza hacia la mole del viejo castillo de la opuesta orilla en cuyos muros artillados han flotado al viento, símbolos de soberanía, las banderas de España, la nación que descubrió, conquistó y colonizó pero no supo gobernar; la de Inglaterra, enemiga de España durante siglos y, por último, la de los Estados Unidos del Norte, la nación generosa que ayudó al cubano en su última guerra por la libertad?

“Son las doce del día. Atruenan los cañones el espacio, las campanas de los templo, repican con fuerza que nunca antes tuvieron y las gargantas desfallecen de tanto vitorear.

“...Ya bajó del mástil de la vieja fortaleza la bandera de Washington, de Lincoln, de MacKinley. Ahora asciende otro pendón. Tiene tres franjas azules v dos blancas, y un triángulo rojo y una estrella. Es la bandera de Narciso López, el agarrotado en la Punta; la de Agramonte, el caído en Jimaguayú ; la de Martí, el genio que en Dos Ríos pasó a ser inmortal; la de Maceo, el héroe que a las puertas de La Habana terminó su vida de inmortales hazañas.

“Ahora cambia el escenario. Estamos en el salón principal del antiguo Palacio de la Plaza de Armas, el Palacio de los Capitanes Generales. Allí está el General Leonardo Wood, el que peleó en Santiago, y con él altos jefes y oficiales del Ejército de los Estados Unidos de Norte América. Pero allí también está un hombre de estatura escasa, que no hace mucho llegó de los Estados Unidos donde, a la muerte de Martí, quedó en la jefatura del Partido Revolucionario. Y este hombre que ya no es joven, fue Presidente de los cubanos en la manigua, en la Guerra del 68.

“Muchos cubanos le rodean, de los que dieron a la Patria todos sus esfuerzos. Entre ellos, el primero, Máximo Gómez, a quien nadie disminuye su condición de cubano, aun cuando naciera en Santo Domingo.

“El hombre que fuera Presidente de los cubanos en la manigua, será ahora el Presidente de los cubanos en el Palacio de los Capitanes Generales. Ya el General Wood le ha hecho el traspaso de todos los poderes.

“...Ya terminó la solemne ceremonia. Wood y sus compañeros regresarán a su patria generosa. Estrada Palma, Máximo Gómez y sus compañeros revolucionarios irán ahora a laborar en la paz por la felicidad de Cuba.”

Lección 41: La Constitución de 1901

Lección 43: El primer alcalde habanero designado por los americanos y el primero por elección popular