Estas son las recetas de “Salsa de Tomates” tal y como aparecen en el libro “Delicias de la Mesa - Manual de Cocina y Repostería” por la Srta. María Antonieta Reyes Gavilán y Moenck editado en 1925 en La Habana, Cuba. Tratamos de mantener el formato original. Presentamos el texto lo más fiel posible a como aparece en el libro, efectuando menores actualizaciones en la acentuación y ortografía.

“Salsa de tomates.

“-Se sancochan de cincuenta a sesenta tomates y en suficiente cantidad de manteca se echan bastante cebolla picada, ajo, el zumo de los tomates pasados por colador, unos cuantos ajíes y bastante perejil. Se pone al fuego y cuando esté algo cocinado el mojo se agrega caldo suficiente, pimienta, y sal, se deja hervir un rato, se le echa un poco de aceite y vinagre; si quedase demasiado espesa se añade más caldo y al separarla del fuego se deslíen dos yemas crudas en un poco de la salsa, se une al resto de ésta y se pone de nuevo al fuego, revolviendo y sin dejar hervir.”

“Salsa Sencilla de Tomates.

“-Se echa en una cazuela manteca suficiente con bastante cebolla picada, cuando hierva se agregan un diente de ajo machacado, seis ajíes dulces, perejil en abundancia, veinte tomates picados; todo bien sofrito se le pone bastante caldo, se deja hervir mucho, se sazona con sal y pimienta, se espesa con harina de Castilla, se cuela y sirve para cocinar cualquier guiso.”

“Salsa de Tomates para Guardarla.

“-Doce tomates grandes maduros, dos cebollas grandes, dos cucharadas de sal, dos de azúcar centrífuga, dos de gengibre en polvo, una de canela en polvo, una de mostaza inglesa, una de nuez moscada rallada, cuatro tazas de tamaño regular de vinagre. Los tomates se pelan, echándoles un momento en agua hirviendo, se colocan enteros en una paila, se agregan las cebollas y los demás ingredientes mezclados con el vinagre; se deja hervir hasta que todo esté bien cocinado, tardará unas tres horas y media y se revuelve de cuando en cuando. Se calientan las botellas teniéndolas un buen rato en agua caliente y la salsa se embotella caliente, se tapa con un tapón de corcho que ajuste bien y se lacra bien para que no penetre el aire.”

Nota: Recuerde que este libro fue editado en 1925, la información, selección de platos e ingredientes son los correspondientes a esa época y tal vez no sean apropiados en su alimentación.

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