La Calle Monserrate es el límite al noroeste de La Habana Vieja. Esta calle se construyó en el espacio que quedó al derribarse la Muralla de La Habana. Realmente es la continuación de Egido al norte, y entre las dos forman el cinturón que separa a La Habana Vieja del resto de la ciudad. A Monserrate también de la llama Avenida de Bélgica.

De acuerdo a José M. de la Torre en su libro de historia de La Habana “Lo Que Fuimos Y Lo Que Somos o La Habana Antigua y Moderna” publicado en 1857:

“Calle de Monserrate, -Comprende la calle del recinto desde la Puerta de la Punta hasta el extremo O. de la calle de la Muralla, y se llama del Monserrate porque en la plazuela de las puertas de este nombre existía la ermita del Monserrate, fundada en 1695, destruida en 1836 y reedificada en extramuros en 1844. El terreno donde se edificó esta iglesia era una estancia y tejar de la familia de los Sigleres: una parte de ella fue ocupada por la Real Muralla, quedando las casitas de guano y muchas arboledas que duraron hasta el siglo pasado.”

Nota: Por favor recuerde que José M. de la Torre publicó este libro cuando La Muralla se comenzaba a demoler y aun la calle actual de Monserrate no era del todo como ahora es. Donde en el presente se encuentran El Malecón y al menos la sección norte de la Avenida del Puerto aun estaban por rellenar.
La mencionada ermita del Monserrate se encontraba en el área donde esta la Plaza de Albear. Cuando se reedificó, en los extramuros en 1844, se elevó a parroquia.