Una cosa que siempre nos intrigó cuando éramos muchachos, allá en Cuba, era como le asignaban ciertas cosas a una persona. Tal persona nunca daba la cara y eventualmente hemos llegado a la conclusión de que era imaginaria o decían tales cosas para que ya no hiciéramos más preguntas. Uno de estos personajes era Bartolo, el dueño de los platanares que en ciertos lugares eran bien frecuentes. Para aquellos que viven en las ciudades y no tienen la menor idea de lo que es una planta frutal, aquí se los mostramos.

Esto parece bobería, pero es muy importante. No tanto para los cubanos, sino para aquellos que aspiran a la ciudadanía; de la cubanidad por supuesto. En varios exámenes y pruebas que hemos visto, y según tenemos entendido son requeridos, esta pregunta siempre sale; nunca falla. ¿De quién es el platanar? y como ya se lo hemos dicho, la respuesta es: De Bartolo.

Usualmente son como cien preguntas, aunque para ciertas cosas, como disfrutar de una pachanga, hemos visto exámenes de no más de cincuenta preguntas. De todos modos, al menos ya tiene una de las preguntas segura. No se olvide: De Bartolo.