“Virginia es una niña hija de un matrimonio adinerado que siempre está de fiesta, por lo que le dan poca atención quedando siempre al cuidado de una institutriz que la asusta diciéndole que van a ponerla en un internado donde sufrirá mucho. Oye un día a sus padres decir que van a divorciarse, pues él quiere casarse con otra mujer que cree lo hará más feliz, y que deben poner a la niña en un internado. Esta escapa de su cana y encuentra a un pordiosero a quien confunde con un angel pues se parece a un santo que ha visto en la iglesia. El pordiosero, creyéndola huérfana, la recoge con cariño. Un día enferma la niña y le confiesa quien es. El mendigo la lleva a su cana y reprende a los padres por su desamor. Rechaza la proposición de quedar con ellos y se va. La niña queda feliz con sus padres que se proponen rectificar, quedando en la creencia de que, efectivamente, el mendigo era un angel.” |