“Un brujo vuduista convierte en zombi a una muchacha, por orden de su madrastra, para que ésta puede reanudar sus amores con el novio de la víctima. Pero el médico de la familia, que se asesora sobre la materia, contrarresta la acción del brujo y resucita a la muchacha impidiendo que la entierren viva, metiendo en el féretro el cadáver del brujo que resulta muerto por el buen celador del cementerio, ayudante del médico. Este, que conoce toda la verdad, encamina luego los sucesos hacia el castigo moral de los culpables, pero muere empujado escalera abajo por la mala madrastra. A pesar de ello, la protagonista recobra su felicidad y encuentra a su verdadera madre y logra enloquecer a la culpable haciéndola creer que ha resucitado. Perdona al novio, pero no se queda con él.” |