Al llegar a París terminada la guerra, un soldado, antiguo estudiante de derecho, sorprende a su esposa en adulterio y la mata. En el juicio resulta absuelto. Desbaratada su vida, va sin rumbo fijo y escéptico de un país a otro, desempeñando oficios muy variados. En Lisboa, de chofer de taxi, espera la llegada del barco que ha de conducirlo al Brasil. Allí conoce a una joven francesa, bella y acaudalada, viuda de un Lord inglés que ha muerto en un accidente de automóvil pocos meses antes. Se enamoran y se unen en forma irregular. Un Inspector de Scotland Yard sigue la pista a la mujer pues se sospecha que en alguna forma ella ha intervenido en la muerte del marido. El detective logra sembrar la duda en el amante de que está siendo utilizado como medio para escapar del continente, cosa que al fin llega a creer al confesarle ella que mató al esposo (con quien casó por interés) para heredar su fortuna. Aunque ambos se aman, las consecuencias de sus crímenes los separa interiormente incapacitándolos para lograr la felicidad que anhelan. Acosada por los celos y sospechas del amante y por la persecución del inspector, se entrega voluntariamente a la justicia, en el preciso momento en que la huida se le había facilitado. |
Escenas altamente sensuales y provocativas, especialmente las de alcoba, con mantenido regodeo. Vestuario y actitudes inconvenientes. Crudeza en el diálogo. Amor libre. Algunas falsas ideas morales. El desenlace final y las consecuencias de los crímenes cometidos por los protagonistas que los incapacita para lograr la felicidad constituyen los únicos ligeros atenuantes de esta película seriamente peligrosa. DESACONSEJABLE. |